Como buen aerotrastornado, no podía dejar de ver la película estrenada este año llamada El Vuelo (The Flight), portagonizada por Denzel Washington en el papel del capitán “Whip” Whitaker.
En la trama de la película, el capitán tras declarar su avión en emergencia, salva con una heróica maniobra la vida de mas de 100 pasajeros. Durante la investigación del accidente la NTSB encuentra fuertes indicios de que el capitán tuvo serias responsabilidades en el accidente.
Pero hablemos de lo aeronáutico que es lo que nos importa, pues este no es un blog de cine ni pretende serlo. El avión que pilotaba Whip era un JR-88, modelo que solo existe en la mente del escritor de la película, pero con un gran parecido a un MD-88.
El capitán Whip inpeccionando los restos del
inexistente JR-88, mas bien parece un MD-88.
Luego de un despegue en condiciones climáticas adversas y turbulentas, el copiloto itenta corregir la altura a lo especificado por la torre, momento en el cual el timón de profundidad parece trabarse y el avión entra en una profunda picada.
Durante la picada el capitán Whip extiende el tren de aterrizaje y mete full flaps, con la idea de aumentar la resistencia y disminuir la velocidad de picada. En ese momento mi aerotrastorno prendio la luz de alarma, viendo a las claras que la película no gasto gran presupuesto en asesoramiento aeronáutico y que el escritor se tomo varios atrevimientos que ponen los pelos de punta a cualquier piloto.
Imagino que meter full flaps en un MD-88 que excede las velocidades límites de picada, generarían un daño estructural mas que importante, si no es que directamente arranca de raiz al flap.
Pero eso no es todo, como la aeronave no logra salir de su picada y el suelo se venia encima, el capitán decide invertir el avión con todos sus pasajeros abordo (como si se tratase del Rans de Falistocco) y aumenta la potencia de los motores de manera de estabilizar al avion. Estando a pocos metros del suelo hace otro medio tonel para salir del invertido y realizar un aterrizaje forzoso en el campo... ah! esto es demasiado para mi me dije!.
El supuesto JR-88 volando invertido durante la película.
Si imaginamos las fuerzas estructurales a las que se sometería un avión comercial al ponerlo invertido, podemos pensar que las alas se desprenderían del fuselaje como consecuencia de las fuerzas G a la que se somerterían los planos invertidos. Además de que los sistemas de control electrónico no fueron diseñados - ni permitirían- para un vuelo invertido.
En un par de sitios en inglés hacen un muy buen análisis de estas situaciones.
Es una pelicula!!!!!!!!.
ResponderEliminarBueno, como buen aerotrastornado esperaba algo mas de realismo en la película :)
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